La respuesta es sí. Las comunidades de propietarios pueden legalmente prohibir el uso turístico de las viviendas si esta actividad afecta al bienestar de los vecinos, como así dictamina el Real Decreto-ley 7/2019.
El Tribunal Supremo respalda esta medida, ya que tiene como objetivo preservar la convivencia y evitar que el constante flujo de turistas altere la paz del edificio. Muchas comunidades están implementando estas restricciones debido al aumento de los alquileres vacacionales, que elevan los precios de la vivienda y modifican el carácter de las zonas.
Así, según el apartado 12 del artículo 17 de la LPH, con una mayoría de tres quintos, se puede limitar o prohibir el alquiler turístico en un edificio. Esta medida busca proteger tanto la tranquilidad de los residentes como el acceso a la vivienda.
Si tengo un piso turístico, ¿cómo me afecta?
Si ya tienes un piso turístico, es normal que te preguntes si las nuevas prohibiciones afectarán tu alquiler. La respuesta es no. Las restricciones aprobadas por la comunidad de propietarios no afectan a los propietarios que ya están operando legalmente. Esto se debe a que, según la ley y lo confirmado por los tribunales, las nuevas normativas no tienen efectos retroactivos.
Esto significa que si ya has legalizado tu vivienda para alquilarla a turistas, la nueva prohibición solo afectará a quienes quieran empezar a hacer alquileres turísticos en el futuro, no a ti. Este principio de no aplicar normas retroactivas asegura que los propietarios que ya cumplían con las normativas previas no perderán su derecho a continuar operando. Aun así, como propietario, es importante tener toda la documentación en orden para evitar posibles problemas.
Si estás pensando en alquilar tu vivienda para uso turístico, aquí tienes 5 consejos clave:
Mantente informado sobre las normativas locales: Además de la legislación nacional, las normativas autonómicas y municipales pueden tener requisitos específicos que debes conocer.
Revisa los estatutos de tu comunidad: Antes de alquilar, asegúrate de que no haya restricciones en los estatutos de la comunidad que prohíban el alquiler turístico.
Obtén los permisos y licencias necesarias: Asegúrate de tener toda la documentación legal en regla, lo que también aumentará la confianza de los huéspedes.
Asiste a las juntas de propietarios: Tu participación en las reuniones es importante, especialmente si se discuten cambios que puedan afectar a los alquileres turísticos.
Considera otras opciones si se prohíben los alquileres turísticos: Si la comunidad decide prohibir el alquiler turístico, puedes explorar alternativas como el alquiler a largo plazo.
Y si aún te quedan dudas, estaremos encantados de ayudarte.